El bloqueo parcial era llevado adelante por militantes de organizaciones sociales como la Corriente Clasista y Combativa (CCC), Somos Barrios de Pie, FTV-Miles, MST y el Polo Obrero, entre otras.
Los organizadores señalaron que se trataba de «una jornada de protesta con ollas populares porque el ajuste brutal que el Gobierno ya está llevando adelante está impactando salvajemente en cada una de las familias de los barrios populares y en aquellos trabajadores formales que cobran por debajo de la línea de pobreza y que viven esta situación con mucha angustia».
«El Gobierno tiene un plan siniestro que vocifera abiertamente: pretende bajar la inflación sobre la base de demoler los salarios y las jubilaciones, así buscan liquidar el consumo. Eso se llama recesión y creen que eso va a lograr bajar los precios», agregaron.
Ante la medida de fuerza, el Ministerio de Seguridad evaluaba la posibilidad de aplicar el protocolo antipiquetes.