El Gobierno buscará seducir a la población kelper de las Islas Malvinas y para ello lanzará un programa de becas para estudiantes del archipiélago ocupado por el Reino Unido desde 1833.
Se trata del programa «Thomas Bridges», nombrado en recuerdo al misionero inglés que habitó en Malvinas en 1856 y luego fundó una misión anglicana en la zona donde actualmente se encuentra la ciudad de Ushuaia, por medio del que se retomará una iniciativa que se impulsó en 2015.
Las becas buscan «fortalecer los vínculos entre los habitantes de las Islas y del continente» y se ofrece una amplia oferta de carreras de pregrado, grado y posgrado dictados por las universidades nacionales de La Pampa, de Río Negro, del Comahue, de la Patagonia San Juan Bosco, de la Patagonia Austral y la de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur.
El Gobierno remarcó que a los estudiantes de las Islas Malvinas «se les reconoce el pleno derecho de acceso al sistema educativo nacional», pese a tratarse de un territorio ocupado ilegalmente por el Reino Unido desde 1833.
Además, la Cancillería subrayó que la iniciativa «se encuadra en lo establecido por la resolución 2065 (XX) de la Asamblea General de las Naciones Unidas y en el compromiso asumido por la Argentina de respetar los intereses de los habitantes de las Islas Malvinas, así como por la voluntad del Gobierno Nacional y de las instituciones educativas nacionales de entablar mejores lazos de interrelación con los habitantes de las Islas».
Los detalles del plan educativo serán dados a conocer a las 15:30 en una conferencia virtual que brindarán el secretario de Malvinas, Antártida y Atlántico Sur, Daniel Filmus, y el secretario de Políticas Universitarias, Jaime Perczyk, junto a los rectores de las seis universidades nacionales de la Patagonia que participan de la iniciativa.
Previo al lanzamiento del programa «Thomas Bridges», la Cancillería recordó que en 1971 se había firmado con el Reino Unido la «Declaración Conjunta referente a comunicaciones entre las Islas Malvinas y el territorio continental argentino», mediante el cual se adoptaron una serie de medidas prácticas que facilitaron el movimiento de personas y bienes entre el continente y las islas en ambas direcciones, promoviendo el establecimiento de vínculos culturales, sociales y económicos.
En ese sentido, destacó que «en materia de educación se organizó una política de becas escolares para la población de las islas que comprendían la posibilidad de matricularse y cursar estudios primarios y secundarios».
«Se les otorgaba gratuitamente la residencia, el seguro médico y dental, los vuelos de ida y vuelta a las Islas junto con un acompañante y el material educativo necesario que comprendía libros y útiles», afirmó.
Y añadió: «De un ofrecimiento inicial de cinco becas, se pasó en poco menos de un año a diez becas y el interés provocó que en 1974 ya se hubieran extendido hasta convertirse en 30. En 1974 se hizo un pedido a las autoridades argentinas para que se les enviara un maestro de español. A partir de entonces, y hasta 1982, viajaron y ejercieron la docencia 10 jóvenes maestros, en su mayoría mujeres».
«En el marco del aniversario número 50 de la firma del `Acuerdo de Comunicaciones´, y convencidos de que el fortalecimiento de los vínculos entre los habitantes de las Islas y del continente es un elemento esencial que redundará en beneficios para todos los interesados, y entendiendo, a su vez, que el desarrollo y las oportunidades educativas son una herramienta fundamental para el progreso humano», se indicó.
«Las seis Universidades Nacionales de la Patagonia han ofrecido distintas opciones de carreras de pregrado, grado y de posgrado a efectos de que aquellos estudiantes de las Islas Malvinas, Georgias del Sur, Sándwich del Sur y los espacios marítimos circundantes interesados puedan desarrollarse académica y profesionalmente en el marco de un programa de becas», concluyó el comunicado del Palacio San Martín.