El Satélite Argentino de Oservación con Microondas SAOCOM 1A, puesto en órbita en las últimas horas, permitirá anticipar inundaciones y sequías, entre otros múltiples usos.
El satélite, lanzado desde la Base Vandernberg, en la ciudad estadounidense de Santa Bárbara, fue desarrollado y fabricado por la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) junto con empresas y organismos como INVAP y la comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA).
El secretario de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, Lino Barañao celebró el éxito del lanzamiento y aseguró que se trata de «una clara señal para el futuro del país».
La nave podrá generar mapas de humedad del suelo diariamente, con resolución espacial y área de cobertura disponibles por primera vez a nivel mundial.
Tiene tres toneladas de peso y una antena radar de 10 metros de largo y producirá principalmente imágenes par el agro, la gestión de emergencias hídricas y la vigilanica del mar argentino.
«Esto no es sólamente una comprobación más de la enorme capacidad del sistema científico-tecnológico argentino, sino también una clara señal para el futuro del país. Un futuro en el que la ciencia, la tecnología y las empresas de base tecnológica van a contribuir efectivamente a la economía del país generando empleo de calidad», destacó Barañao, desde la base aérea norteamericana donde se realizó el lanzamiento.
El equipo partió hacia el espacio en el cohete Falcon 9 Block 5 de la empresa SpaceX, desde la Base Vandenberg, ubicada en California (Estados Unidos), el domingo 7 a las 23.21 hora argentina.
La ocasión fue celebrada en el Centro Cultural de la Ciencia C3 junto a investigadores, técnicos, especialistas y público en general, en el marco de la Noche Espacial, que contó con actividades temáticas y pantallas gigantes para compartir la transmisión en directo del lanzamiento a través de la Televisión Pública.
Por su parte, en el Centro Espacial Teófilo Tabanera de la CONAE en Córdoba, el secretario de Planeamiento y Políticas en Ciencia y Tecnología, Jorge Aguado afirmó que la puesta en órbita del SAOCOM «es fruto de años de investigación, y desarrollo, de colaboración público-privada, nación-provincias y de trabajo conjunto con Italia».
«La información que nos brinde mejorará la competitividad de sectores productivos y nos dará herramientas muy útiles para manejo de crisis, seguridad, defensa y seguimientos de obras de infraestructura», indicó Aguado.
A su vez, el director ejecutivo y técnico de la CONAE, Raúl Kulichevsky, comentó que «el lanzamiento de este primer satélite de la constelación SAOCOM, un satélite con un nivel de complejidad tecnológica a la altura de los más importantes desarrollados por agencias espaciales internacionales, es el resultado de la de la continuidad del trabajo del Sector Espacial Argentino».
El SAOCOM 1A fue diseñado para proveer datos en cualquier condición meteorológica, tanto de día como de noche, a través de microondas en banda L.
Estas características le otorgan capacidades de observación especialmente útiles para prevenir, monitorear, mitigar y evaluar catástrofes naturales o antrópicas; para aplicaciones en agricultura como humedad de suelo, índices de vegetación y control de plagas; aplicaciones hidrológicas, costeras y oceánicas; aplicaciones en nieve, hielo y glaciares; en estudios urbanos, de seguridad y defensa, entre otras áreas de interés estratégico.
Asimismo, la puesta en funcionamiento del satélite permitirá atender las necesidades de información de los sectores socio- productivos considerados en el Plan Espacial Nacional, e integrar en forma operacional el Sistema Ítalo Argentino de Satélites para la Gestión de Emergencias (SIASGE), resultado de la cooperación vigente con la Agencia Espacial Italiana (ASI).
El desarrollo y la construcción estuvo a cargo de CONAE, junto con numerosas empresas de tecnología e instituciones del sistema científico-tecnológico nacional, entre las que se encontraron INVAP, la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), y la firma VENG.
La constelación SAOCOM 1 está compuesta por dos satélites idénticos, denominados A y B.
En 2007 se inició la ingeniería básica del satélite, en su configuración actual.
En 2013, comenzó la construcción del modelo de vuelo del SAOCOM 1A y finalizó el año pasado. En tanto, la fabricación del SAOCOM 1B empezó en 2015 y continúa en curso.
En el Centro Espacial Teófilo Tabanera de la CONAE, ubicado en Falda del Carmen (Córdoba), se controlará el estado del satélite y desde allí, se mantendrá la comunicación con el SAOCOM 1A y se enviarán las instrucciones para la captación de información.