Ahora, la Justicia Federal de La Plata ordenó investigar a efectivos de la subdelegación de Investigaciones de Tráfico de Drogas y Crimen Organizado de Esteban Echeverría tras esa confesión.
El hombre fue condenado a cuatro años y medio de prisión por tenencia de drogas con fines de comercialización por el juez del Tribunal Oral Federal 1 José Michilini a raíz del caso que llegó a juicio por el hallazgo de 214 kilos de marihuana el 21 de julio de 2019.
Según las actuaciones labradas por la Policía, se recibió una llamada anónima ese día y en un allanamiento posterior en una casa de Berazategui se encontraron los 214 kilos de marihuana que el acusado tenía escondidos en una heladera y en una habitación.
A la hora de declarar en el juicio, el acusado dijo que el día anterior, el 20 de julio de 2019, escuchó golpes en el portón de su casa y pudo ver una camioneta y otro vehículo, y que tres policías de civil entraron a su casa.
Cuando encontraron la droga, los policías le exigieron plata a cambio de no hacer la denuncia pero como no contaba con suficiente dinero, los uniformados le ofrecieron lo siguiente: llevarse parte del cargamento de marihuana, unos 250 kilos, y a cambio morigerar su situación pues le dijeron que no era lo mismo tener una causa por la tenencia de más de 400 kilos que por la mitad.
El acusado dijo que los policías colocaron la camioneta de culata al portón y cargaron manualmente los paquetes de marihuana, un total de 250 kilos.
Al día siguiente, tras una llamada anónima a la policía, la casa del hombre fue allanada y le encontraron la marihuana que le habían permitido tener.
El acusado dijo en su defensa que no era suya la sustancia, sino que se la guardaba a otra persona, algo que no fue comprobado durante el juicio oral y público.
El hombre fue detenido y llegó a juicio, donde hizo la confesión, a partir de la cual, ahora el juez Michilini ordenó que se investigue a los policías de Esteban Echeverría que pudieron haber participado de los hechos.
En el juicio declararon varios efectivos que recibieron la denuncia e hicieron el allanamiento en la vivienda del acusado, pero también tres vecinos de su casa que vieron algo que fue clave para sospechar de los efectivos.
Los tres testigos dijeron recordar que el 20 de julio de 2019, cuando se celebra el Día del Amigo, vieron a los policías golpeando el portón del imputado, y minutos más tarde una camioneta (de las mismas características que había denunciado el condenado) de culata, cargando bultos en su parte trasera.
En el veredicto, el juez Michilini dijo que se debería «profundizar la investigación que se ha iniciado en atención a los dichos del imputado, pues, más allá de la responsabilidad -que en el caso¬, le corresponde, cierto es que la cantidad de estupefaciente incautado en su poder y la modalidad de guarda, permite presumir razonablemente la participación y o vinculación de otras personas, sin descartar en modo alguno, la posible intervención o algún tipo de rol de agentes pertenecientes a las fuerzas de seguridad».
Por ello, más allá de la condena de cuatro años y medio al acusado, Michilini ordenó investigar a los policías que habrían participado de la apropiación de la droga que aquel acusó previamente.