La mujer a la que le mataron su pequeño hijo además de violarla en una playa de la localidad santacruceña de Puerto Deseado regresó a la provincia de Salta junto con su familia.
María Mercedes llegó a Salta alrededor de las 22:00, junto a su esposo, Celso Subelza, y tres de los hijos del matrimonio, una semana después del horroroso episodio, y fueron recibidos por el gobernador de Salta, Gustavo Sáenz.
En la reunión, estuvieron presentes además el ministro de Seguridad provincial, Juan Manuel Pulleiro; el coordinador de Enlace y Relaciones Políticas de la Gobernación, Pablo Outes, y la secretaria de Derechos Humanos, Mariana Reyes, informó el sitio del diario El Tribuno.
Las familia pasó la noche en una casa de huéspedes perteneciente a Gendarmería Nacional y se preveía que en las próximas horas se traslade a Rosario de la Frontera, de donde es oriunda, lugar en el que se iban a inhumar a Santino, el pequeño de cuatro años asesinado, cuyos restos estaban a punto de ser trasladados a ese destino.
Reyes dijo que el gobierno salteño se puso a disposición de la familia y describió la situación como «muy conmovedora».
«Lo que ha pasado es trágico y desde la provincia de Salta nos hemos puesto a disposición de la familia. Hemos estado en contacto desde el momento que ocurrió el hecho con la gente de Puerto Deseado, la Municipalidad y por supuesto la familia a quienes se los asistió y acompañó desde un primer momento», explicó la funcionaria.
El aberrante hecho ocurrió el pasado jueves por la tarde en la zona costera de Puerto Deseado, al norte de la provincia de Santa Cruz.
Allí, María Mercedes, de 45 años, caminaba junto a su hijo Santiago Luciano Ricardo Subelza, de 4, cuando se cruzaron con los atacantes en un trayecto denominado «Cueva de los Leones».
Según el relato de la mujer, desde allí fue llevada junto a su hijo hacia la zona de la playa y el niño fue arrojado desde un acantilado, lo que provocó su muerte inmediata.
El niño asesinado murió por una hemorragia interna producto de politraumatismos de cráneo realizados con un elemento contundente, según lo determinó la autopsia.
Por el caso permanecen detenidos un hombre de 33 años llamado Omar Alvarado y un adolescente de 16.